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alquimista

El mercader y la fe.

Puedo escribir los versos mas tristes esta noche.... Pero no lo hare. Esta vez contare un cuento.

En aquellos dias un hombre tenia que partir hacia tierras lejanas por negocios, preparo sus cosas y partio hacia su destino en la caravana y al cabo de un mes de viaje paso por la ciudad santa. Bajo y fue al lugar sagrado a orar a su Dios pidiendole que ilumine su camino y le ayude en sus empresas. Cuando termino de hacer la peticion una paloma bajo del cielo y se poso en su ofrenda.

El hombre se alegro por la señal que habia llegado del cielo y fue feliz a su caravana. Partió y llego a la ciudad de los mercaderes 2 meses despues. Durante el trayecto, cada vez que le ocurria un incidente en camino a esta ciudad, su fortaleza y fe en Dios era tanta debido a la señal que habia recibido, que luchaba contra los obstaculos y continuaba adelante.

En la ciudad mercader, los sucesos del viaje se repitieron, intentaron estafarlo, humillarlo, robarle, etc. Pero el vio en cada uno de los incidentes, pruebas a su fe en Dios y en si mismo. Al final despues de la venta regresaba por el mismo camino y siguio teniendo los mismos incidentes que la inicio del viaje.

Cerca de la ciudad santa, su hermano que con el viajaba empezo a quejarse, le dijo que si el Altisimo estuviera con ellos no hubiera tenido sino un viaje tranquilo, que las señales de Dios le parecian una casualidad, que esa paloma pudo venir de un palomar cercano.

Cuando llego a lugar de oracion bajo el mercader y fue a orar. El hermano se puso a dar vueltas por el recinto sagrado y comtemplo los comercios que habia por alli. Casualmente encontro un negocio que vendia palomas y le preguntaba si algunas se le escapaban de vez en cuando. A lo cual el vendedor le dijo que si.

Cuando su hermano regreso de orar, le conto todo esto y esperaba ver su reaccion. El mercader sonrio y ambos partieron rumbo a casa.

Llegaron al cabo de 1 mes a casa. Fueron recibidos por la familia, se preparo una fiesta y todos bailaron y cantaron, en el momento cumbre de la fiesta el mercader tomo la palabra y agradecio a Dios sobre todas las cosas. Su hermano se molesto y cuando termino la fiesta, converso con su hermano:

No ves que Dios no nos envio señal alguna? No ves que estuvimos a punto de ser asaltados, muertos, burlados en el camino? No ves que lo que tomaste como una señal de Dios era solo una paloma que se habia escapado?.

El mercader le respondio: Si, es verdad, todo tiene una explicacion lógica. Pero dime hermano, hubiera sido necesario que el obrara un milagro para demostrarme que existe? hubiera sido necesario que bajara un angel del cielo con el destello de mil soles para que tuviera fe en El? Si yo no hubiera visto nada en mi ofrenda igual hubiera procedido y le hubiera agradecido a El. No es cuestion de señales. Es cuestion de Fe.

1 comentario

digler -

la fe es la sangre que corre por nuestras acciones. muy buena historia